A los hombres no les gusta mancharse las manos


Distribución y consumo nº 138
2015 - Vol III

Hacía mucho que Ven Cabreira sobrevivía. En España había trabajo de sobra, pero solo faltaba que alguien pagara. A los jóvenes los pueden ilusionar diciendo que es el principio y que pronto escalarán y empezarán a cobrar. Pero a los viejos, ya no hay quien les mienta. Mercado Calvario de Vigo.